Barbie Signature Mera

Reina de los océanos y protectora de la Atlántida, Mera se une a la línea Black Label de Barbie Collection.

Desde que el anuncio de La Liga de la Justicia, yo esperé con ansias su estreno. Aunque ciertamente no es una gran película (ni siquiera una buena película), yo la considero disfrutable. Aunque sigo teniendo problemas para aceptar a Batman y Superman, los nuevos personajes, aunque no muy definidos, sin duda alguna robaron cámara, especialmente Flash y Aquaman.

Otro de los personajes introducidos en la película es Mera, quien en los cómics se convierte en la esposa de Arthur Curry “Aquaman”. Su presencia en la película es un mero cameo, en preparación para la próxima película de DC Comics centrada en el personaje acuático, por lo cual realmente me sorprendió que esta fuera una de las 2 muñecas lanzadas por Mattel para promocionar Liga de la Justicia (la otra siendo una tercera versión de la Mujer Maravilla).

De cualquier forma, en cuanto vi fotografías de Mera, me encantó su rostro, aunque en lo personal, no creo que se parezca mucho a Amber Heard.

En cuanto escuche que había sido vista en tiendas, salí a buscarla, y no la encontré por ningún lado. Al preguntar a los encargados de juguetería de distintas tiendas departamentales donde la habían visto (Juguetron y Liverpool), me aseguraban que ambas muñecas no se encontraban en su inventario.

Finalmente me cansé de buscarla y decidí dejarla pasar, cuando sorpresivamente la encontré de casualidad en Sears Universidad, y además con un nada desagradable descuento. Aun así, tuve mis dudas, hasta que finalmente, otro par de coleccionistas se acercó a las muñecas, y después de conversar un rato, me convencieron de aprovechar la oportunidad.

Fuera de su caja, Mera luce aún más espectacular. Su cuerpo es totalmente articulado, con brazos estilo Made To Move y piernas como las muñecas Barbie Look (parecido a la primer Mujer Maravilla de Batman vs Superman, cuando no tenía los brazos tan musculosos; aunque siento que las piernas de Mera son más anchas, pudiendo ser esto un efecto visual de su vestuario).

Mera presumiendo sus articulaciones

A pesar de sus envidiables articulaciones, su rango de poses se ve limitado por su armadura, que particularmente le dificulta sentarse, ya que las piezas de las piernas y del torso chocan entre sí. Además, es prácticamente imposible quitar la armadura de la muñeca sin dañar ninguna de las piezas, ya que no solo se encuentra cosida al traje, también está pegada en varias secciones, incluyendo el cuello de la muñeca (esto también contribuye a otros posibles errores, ya que, por ejemplo, mi muñeca tiene una ligera mancha en su cuello de la pintura verde de la armadura). Por otro lado, la pieza de la cabeza no puede sostenerse sin sus costuras al cabello, y desafortunadamente el pico ha lastimado un poco el plástico de la cabeza en la frente.

¿Problemas para sentarse?

Ahí está el problema, su armadura choca entre si

De cierta manera, me desilusionó la imposibilidad de cambiarle la ropa a Mera sin tener que recurrir a cambiarle el cuerpo o arriesgarse a grandes daños. Entiendo que es una muñeca de coleccionistas adultos, pensada principalmente para tenerse en exhibición, y cumple maravillosamente con ese objetivo, tanto fuera como dentro de la caja.

Sus detalles son relativamente pocos, y la mayoría están relacionados más con la variabilidad en la fabricación de muñeca a muñeca que con el diseño de la misma. De hecho, ninguno de ellos es aparente fuera de caja, y afuera, debes prestar demasiada atención para siquiera notarlos. Y sin duda alguna es genial para fotografiar.

P.D. Tras escribir esta entrada, la base que viene incluida con Mera se quebró de uno de los brazos que sostienen a la muñeca de la cintura. Ambas muñecas Black Label que he comprado vienen con este tipo de base, y ambas se han roto de idéntica manera, a pesar del cuidado que he tenido de no aplicar demasiada fuerza. Así que tengan mucho cuidado al manipular este tipo de base, y espero que Mattel encuentre una solución al problema, puesto que me he enterado que no soy la única afectada, de hecho, se trata de una situación demasiado común.